Los farmacéuticos damos la cara contra el cáncer de mama
¿Cómo podemos los farmacéuticos ayudar en la lucha contra el cáncer de mama?
En 2018 se diagnosticaron 32.825 nuevos casos de cáncer de mama en España, un 30% más que en 2012. Se prevé que 1 de cada 8 mujeres desarrollen la enfermedad a lo largo de su vida, según la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC).
Pese a los importantes progresos que se han producido gracias a la investigación farmacológica y a la detección precoz de la enfermedad, actualmente, 9 de cada 10 mujeres sobreviven al menos 5 años tras el diagnóstico. Es imprescindible poner en práctica una estrategia integral de prevención y atención al paciente. La cual implique a los diferentes actores sanitarios. Entre ellos los farmacéuticos. Con este espíritu, y aprovechando la cercanía de los farmacéuticos con los ciudadanos, la Fundación Cofares y la AECC han aunado fuerzas para concienciar sobre el cáncer de mama. Y, además, para canalizar la ayuda a los enfermos y sus familiares, a través de la campaña informativa:
“Contigo, damos la cara contra el cáncer de mama”
La figura del farmacéutico y el cáncer
A lo largo de los años, la atención de los farmacéuticos ha sido fundamental para minimizar los efectos secundarios de los tratamientos oncológicos. Entre ellos destacamos: sequedad de la piel, caída del cabello, problemas digestivos, sequedad vaginal, insomnio y depresión, entre otros.
Si bien estos tratamientos se realizan habitualmente en el ámbito hospitalario, es en los días previos al tratamiento y a la hora de volver a casa cuando el farmacéutico juega un papel esencial en la mejora de la calidad de vida de sus pacientes. Aportando un enfoque integral a los tratamientos y teniendo en cuenta su vertiente psicológica.
Esta visión holística del tratamiento requiere de una actualización constante de los conocimientos sobre la enfermedad y su terapéutica. Los cuales los farmacéuticos deben abordar para contribuir a mejorar la calidad de vida de sus pacientes.
Como profesionales de la salud más cercanos al paciente, los boticarios de Cofares pueden contribuir, además, a la prevención del cáncer de mama. Ya sea informando sobre los factores de riesgo. Así como de la necesidad de realizar mamografías periódicas (gratuitas en España). Además, pueden responder a las preguntas más frecuentes sobre las consecuencias físicas y psicológicas de esta enfermedad.