El estudio de la Comisión Nacional de Mercados y Competencia en materia de Farmacia: Una recopilación de prejuicios
Recientemente se ha publicado un Estudio sobre la farmacia del que es autora la Comisión Nacional de Mercados y Competencia. Es un Estudio que ha generado un rechazo generalizado.
Para empezar sorprende que, a pesar de dedicarse a la farmacia, el Estudio ni siquiera las mencione en su título, que habla de la «distribución minorista» de medicamentos.
Con ello, desde el principio, la CNMC prescinde de la función sanitaria de la farmacia, queda reducida a mero operador económico.
Pronto se puede comprobar que las recomendaciones del Estudio, no pasan de ser una recopilación de propuestas y de planteamientos en los que viene insistiendo desde hace años la Comisión Nacional de Mercados y Competencia.
Ni la Farmacia Comunitaria, ni el farmacéutico, ni los Colegios Profesionales son objeto de ningún comentario favorable.
Aunque formalmente este Estudio reconoce la naturaleza especial de los medicamentos y respeta la salvaguardia de la Salud Pública, sin embargo, ignora por completo las Sentencias del Tribunal Europeo de Justicia, que reconoce el modelo de titularidad y propiedad como ajustado a la normativa comunitaria.
Por el contrario, los autores del Estudio atacan frontalmente dicho modelo y ponen sistemáticamente al mercado por encima de la planificación y de la ordenación farmacéutica, que son garantías básicas de calidad asistencial.
Según el Estudio, lo realmente importante sería una mayor libertad en el acceso al mercado, poniendo en cuestión todo aquello que, en su opinión, pueda ser un obstáculo, aunque ello comporte dejar a un lado y minusvalorar las garantías de profesionalidad y de calidad que ofrecen los Farmacéuticos y las farmacias a los ciudadanos.
El tratamiento farmacoterapéutico, los PRM, la dosificación, el consejo farmacéutico o la adherencia son temas que, a la luz del documento que comentamos, no tendrían especial relevancia.
De otro lado, es chocante la continua referencia a «técnicos» en medicamentos en lugar de a farmacéuticos. Por cierto, el Estudio no se atreve a mencionar a qué «técnicos» se quieren atribuir las competencias profesionales de los farmacéuticos.
Los prejuicios llevan también a los autores del Estudio a plantear la sustitución en el medio rural de los farmacéuticos por «médicos dispensadores», lo que supone ignorar las competencias que legalmente corresponden a unos y otros y no tener presente que en numerosos pueblos la farmacia es la única estructura sanitaria disponible.
Otra «recomendación” consiste en querer que se extienda la venta on line a medicamentos que requieren prescripción médica, sin intervención del farmacéutico. Se trata de una propuesta notoriamente arriesgada, porque incentiva el consumo de medicamentos, en lugar de su uso racional, y lo fomenta sin las necesarias garantías.
De otra parte, frente al modelo de retribución vigente, el Estudio pretende su eliminación, pero lo hace sin atreverse a concretar un sistema alternativo. No se sabe quién ni cómo se pagaría.
En cuanto a los horarios, autorizaciones administrativas, integración vertical, supresión de la obligación de colegiación y funciones de los Colegios Profesionales, el Estudio acumula opiniones que difícilmente pueden elevarse a la categoría de recomendaciones.
En suma, la CNMC parecería querer que se reabra un debate, ya superado si se tiene en cuenta la inequívoca doctrina del Tribunal Europeo de Justicia, el reconocimiento social y profesional del farmacéutico, los servicios que día a día ofrecen las farmacias a los pacientes y su eficaz colaboración con el Sistema Nacional de Salud.
Gasolineras, servicios aeroportuarios, de telecomunicaciones, servicios médicos, etc, etc, etc. todos están liberalizados y ofrecen sus productos y servicios en libre competencia desde hace años sin problema alguno.
El modelo de liberalización de farmacias está implantado en Navarra desde hace años y no hay alertas sanitarias.
Yo tengo un título de Farmacia y no puedo ejercer libremente mi profesión, pero un médico, odontólogo, fisioterapeuta, etc, etc, etc SI pueden ¿cuál es la diferencia para que no liberalicen el sector farmacéutico?
Buenos días,
Toda opinión merece respeto, pero en todo caso hay que tener en cuenta que los medicamentos no son gasolina ni productos de supermercado.
Son productos sanitarios que requieren plenas garantías de seguridad y que precisan una dispensación basada en la profesionalidad y en una planificación que garantice el acceso a las farmacias, que son, conviene recordarlo, establecimientos sanitarios y como tales sujetos a una regulación especial.
Nuestro modelo de farmacia tiene pleno respaldo del Tribunal de Justicia de la UE y es el que se aplica en los países más relevantes de nuestro entorno.
Julio Sánchez Fierro
Pienso que la regulación es buena y deseable en todas las profesiones. Y me parece lamentable la falta de previsión y de planificación, por parte del gobierno , a través de las universidades , para adecuar las plazas para alunmos en las carreras con las necesidades reales de profesionales. No se pueden dar titulaciones inutiles, no se pueden formar tantos profesionales para el paro.
Gastamos el dinero de nuestros impuestos en dar formación a un número de individuos para profesiones que la sociedad no puede absorber. No se informa debidamente al estudiante de cual será su futuro: El paro.
Después el recien titulado reivindica un puesto de trabajo al que no puede acceder.
Hay que regular antes. Y si usted se empeña en estudiar lo que la sociedad no demanda, pues vaya usted a una universidad privada, se lo paga usted, y usted será el único responsable de su destino profesional.
Pero en estos momentos, el gobierno es el responsable del fracaso, por su silencio, por mirar a otro lado , cuando lo que toca es regular . Digamos que se necesitan medidas profilacticas para la enfermedad social del paro.
Y pienso que habría que regularlo todo, farmacias, cosultas médicas, odontológicas, bares, gasolineras, supermercados……
Nadie está no reconociendo y en contrario de que los medicamentos estén custodiados con responsabilidad pero después de una carrera durisima y muchos más años de doctorados y cursos me puede explicar porque no puedo abrir yo una farmacia y otro tenga 4 que ni siquiera está en ella. Yo soy bastante responsable ya le digo y no puedo abrirla.