La inteligencia está de moda
¿Sabemos qué es la inteligencia artificial? En ciencias de la computación lo definen como la capacidad de razonar de un agente no vivo. En el año 1315, Ramon Llull en su libro Ars Magna tuvo la magnífica idea de que el razonamiento podía ser efectuado de manera artificial. Pero no fue hasta 1997 cuando Gari Kaspárov, campeón mundial de ajedrez, perdió ante la computadora autónoma Deep Blue. Sucesivamente se fueron desarrollando diferentes computadoras, y tuvimos que esperar a IBM en el año 2011 para que desarrollase la ‘supercomputadora’ llamada Watson. Esta ganó una ronda de tres juegos seguidos de Jeopardy!, venciendo a sus dos máximos campeones, y ganando un premio de 1 millón de dólares.
En la línea de estas computadoras autónomas encontramos el programa de inteligencia artificial AlphaGo de Google, programa que destaca por su capacidad para tomar decisiones complejas analizando las más interesantes, llegando a ganar al juego ‘Go’ 3 veces consecutivas frente al número uno del mundo: el surcoreano Lee Se-dol.
Otros programas como los del profesor Geoff Hinton, una eminencia en el campo de la inteligencia artificial que trata de ir un paso más allá. Hinton y su equipo trabajarían para ayudar a dotar a las máquinas de una capacidad lógica y de conversión natural que hasta ahora solo habíamos visto en el cine, como la película ‘Her’, haciendo que vivamos en realidad lo que la ficción nos pintaba en la película: que hablemos con una máquina, y no precisamente para preguntarle qué tiempo hará mañana, sino para pasar un buen rato.
Pero tras todos estos razonamientos lógicos al fin y al cabo automatizados, llegan los que parecen incontrolables por un ordenador… ¿En qué posición esta la ‘EMOCIÓN’?
Aunque, por el momento, la mayoría de los investigadores en el ámbito de la Inteligencia Artificial se centran sólo en el aspecto racional, muchos de ellos consideran seriamente la posibilidad de incorporar componentes «emotivos» como indicadores de estado, a fin de aumentar la eficacia de los sistemas inteligent.
A los sistemas inteligentes el no tener en cuenta elementos emocionales les permite no olvidar la meta que deben alcanzar. En los humanos el olvido de la meta o el abandonar las metas por perturbaciones emocionales es un problema que en algunos casos llega a ser incapacitante.
La inteligencia artificial también puede ayudar al sector sanitario, ¿cómo? ¿Recordáis que antes os hablaba de la supercomputadora ‘Watson’? Es ahora cuando la compañía IBM ha anunciado 2 nuevas versiones de esta. Una de la que quiero hablar es la diseñada específicamente para determinar un mejor tratamiento para pacientes con cáncer de pulmón. (Lo consigue a través del análisis de una «biblioteca» de millones de datos clínicos e investigaciones médicas). Esta tecnología también se está aplicando en otras áreas como apoyo a los profesionales. Elisa Martín, Directora de Tecnología e Innovación en IBM, explica que en el sector de la salud es capaz de identificar con hasta tres horas de adelanto si un diabético va a sufrir un escenario hipoglucémico. ¿Te imaginas que sea un ordenador quien te avise de que vas a sufrir una crisis hipoglucémica?
Esto no implica que en un futuro se vaya a suplantar la figura de los médicos por una Inteligencia Artificial avanzada, todo lo contrario, la tecnología servirá para complementar el trabajo de los profesionales, dirigiendo grandes cantidades de información sobre casos e investigaciones en un tiempo récord para que el médico pueda encontrar el mejor tratamiento posible ante cada situación. Se alimenta de múltiples fuentes. Tanto de datos estructurados como pueden ser las bases de datos, como los no estructurados que se obtienen a partir de libros, informes, blogs, investigaciones, tuits o imágenes. Es capaz de procesar millones de datos (hasta 800 millones de páginas) en apenas unos segundos y responder a cuestiones complejas, para las que formula hipótesis y escoge la respuesta con mayor nivel de confianza. Todo esto en tiempo real.
Pero es que los avances se suceden rápidamente y las marcas trabajan para posicionarse y generar productos cada vez más asombros. En Japón la inteligencia artificial la están empezando a aplicar también en sistemas de atención al cliente, detectando cuando el consumidor está enfadado y adecúan su respuesta a esta situación… Parece Ciencia Ficción, ¡pero es real! Google no se iba a quedar atrás y ha conseguido patentar una tecnología que permite crear personalidades para los robots. Una personalidad completamente a medida. Y lo realmente inquietante, el robot puede aprender una personalidad de una persona real y ser como ella (imaginad un familiar fallecido…) Si además tenemos nuestra memoria en la nube… … …
¡¡Ufff!! He nacido demasiado pronto, ¡qué rabia!